El Ministerio Público Fiscal pidió elevar a juicio una causa de amenazas

Lo solicitó la fiscal Nadia Schargrodsky por considerar que se reunieron suficientes elementos de prueba para formular la acusación en contra de un hombre señalado por su ex mujer como el responsable de la comisión del delito amenazas.

Así lo solicitó la fiscal Nadia Schargrodsky por considerar que se reunieron suficientes elementos de prueba para formular la acusación en contra de un hombre, con antecedentes penales por violencia de género, ahora señalado por su ex mujer como el responsable de la comisión del delito AMENAZAS (Arts. 149 bis del C.P.A.).

Desde el punto de vista jurídico la fiscal explicó que “el delito de amenazas consiste esencialmente, en haber querido infundir temor, y en haber realizado con ese fin, algún acto que pueda infundirlo. Comete ese delito, efectivamente, quien con el fin de atemorizar (“alarmar o amedrentar”), anuncia a otro un mal grave, posible y futuro, con idoneidad para intimidar , o sea, lograr el efecto de la amenaza, y que depende de la voluntad de quien amenaza.”

El hecho se produjo cuando la víctima fue a buscar a su hijo menor a casa de su ex marido, y este le habría dicho “deja ese lugar donde estas, volvé a la casa, no quiero que compartas mis hijos con nadie, de lo contrario te queda tres días porque te voy a hacer miercole a vos y al que esté con vos”. Además la habría tomado fuerte del brazo.

Por ello en su pedido ante la jueza, la representante del MPF manifestó que este hecho logra infundir temor sobre la víctima, teniendo en cuenta que tan solo días atrás se le había vencido una medida con dispositivo de geo localización para que no se acerque a ella.

En relación al hecho, la fiscal afirmó que en este caso, la denunciante también fue víctima de violencia de género, en virtud de lo previsto por el artículo 4 de la Ley Nacional 26.485 que dice “toda conducta acción u omisión, que de manera directa e indirecta, tanto en el ámbito público como en el privado, basada en una relación desigual de poder, afecte su vida, libertad, dignidad, integridad física, psicológica, sexual, económica o patrimonial, como así también su seguridad personal. Quedan comprendidas las perpetradas desde el Estado o por sus agentes”.

De esta manera, al haberse diligenciado todas las pruebas y establecido las circunstancias de tiempo, modo, y lugar en la comisión del delito; la fiscal le solicitó a la jueza que  clausure la instrucción y eleve la presente causa a juicio.