Rina Mercado Ortiz, madre de niño de 9 años, que ingresó por un apendicitis y terminó muriendo por un edema cerebral. “Se pasaron de anestesia”, indicó y agregó que “era un niño sano y me lo entregaron en un cajón”.
La familia de un niño de 9 años que murió en el Hospital de la Madre y del Niño, realizó una grave denuncia contra al menos tres profesionales de esa institución, por presunta mala praxis.
Rina Mercado Ortiz, madre de niño oriundo de Sañogasta, quien contó detalles del caso, remarcando que su hijo ingresó por un apendicitis y terminó muriendo por un edema cerebral.
“Era un niño super sano, pero tenía un dolor agudo en el abdomen. Por eso primero lo llevamos a la sala en Sañogasta, lo derivaron primero a Chilecito y luego a Capital”, detalló.
La madre contó que una vez llegados al hospital de la Madre y del Niño, los atendió el cirujano Fajardo, que decidió realizar una operación de urgencia de apendicitis.
“Le hicieron la cirugía de la cual salió bien y a las 3.00 de la madrugada nos avisan que había hecho un paro y que lo indujeron a un coma”, relató la madre, quien aseveró que su hijo “era un niño deportista, andaba más de 20 km en bicicleta, jugaba al fútbol y al básquet”.
“Desde ahí empezaron con las mentiras”, denunció y agregó que en ese momento le dijeron que tenía un leve edema cerebral y una leve insuficiencia renal.
Sin embargo, luego habló con el neurólogo de apellido Díaz, quien le manifestó que el cuadro de su hijo “era gravísimo”.
A partir de ello, la mujer sospecha que hubo mala praxis en la primera operación, lo cual habría generado el edema cerebral. “Se pasaron de anestesia”, remarcó, aunque aclaró que “estamos esperando los resultados de la autopsia”.
La mujer indicó que en principio, la denuncia apunta a tres médicos, pero aclaró que “hay que ver quienes son los que estuvieron en la cirugía”.
“Entró en cirugía el 13 de febrero, desde ese momento no despertó más”, relató y agregó que el 19 de abril le comunicaron la muerte.
“Tuvo que pasar por traqueotomía y varias cirugías”, manifestó sobre el padecimiento que tuvo su hijo desde la primera operación, y sentenció con una frase que lo resume todo: “era un niño sano y me lo entregaron en un cajón”.